Nomenclatura
Denominación
VALLE DE BRAVO
Toponimia
Han sido varios los nombres que se le han dado a Valle de Bravo desde la llegada de los frailes franciscanos a su territorio, el primero de ellos fue San Francisco del Valle de Temascaltepec (Temascaltepec de indios), Villa del Valle y Valle de Bravo, aunque para distinguir entre el primero de éstos y Real de Minas de Temacaltepec, se optó por llamarle simplemente Valle
Temascaltepec, es un nombre náhuatl cuya etimología proviene de las raíces: temazcalli el baño de vapor de los antiguos mexicanos, que Clavijero compara con acierto al holocausto egipcio y tépetl: cerro. “Cerro de los temazcales o baños” (Olaguíbel).
Temazcalli o temazcal o temascal significa: “baño de vapor”, por ende, el nombre Temascaltepec, significa: “cerro de los baños de vapor” (Gutiérrez Arzaluz).
El apelativo Bravo es en honor del general Nicolás Bravo, a quién se le unieron varios nativos (entre los que destacaron José Rebollar, Ramón Uriarte y Francisco Ortíz Luque) de la entonces llamada Villa del Valle para defender en 1847 el Castillo de Chapultepec, ante la invasión norteamericana.
Conforme a lo dispuesto por el artículo 6 de la Ley Orgánica Municipal del Estado de México, el nombre actual del municipio es Valle de Bravo y su cabecera municipal es Valle de Bravo.
Escudo
El glifo del municipio se podría formar tomando la figura de un temascal, del Códice Mendoza, añadiendo el ideograma de un tépec o tépetl para que quede completo el glifo.
Escudo
El escudo heráldico del municipio de Valle de Bravo, se describe como sigue: en la parte exterior y siguiendo el contorno del escudo, una leyenda que a la letra dice: “El que más vale, no vale tanto como vale Valle”.
Cuatro cuarteles y un círculo oval al centro, en los que se representan los símbolos del progreso local y nacional, así como la belleza natural y artística del municipio y que son: cuartel superior izquierdo, el templo de Santa María Ahuacatlán; en el cuartel superior derecho, una peña; en inferior izquierdo, una torre eléctrica; en el inferior derecho, un árbol y en el círculo oval, al centro, un cántaro de barro al que circunda la frase: “Pueblo antiguo noble amigo”.
Localización-Ubicación
Valle de Bravo deriva del apelativo Bravo en honor del general Nicolás Bravo. Colinda al norte con Donato Guerra; al sur con Temascaltepec; al este con Amanalco y Temascaltepec; al oeste con Ixtapan del Oro, Santo Tomás de los Plátanos y Otzoloapan. Destaca por la alfarería tradicional, por el barro café, las artesanías textiles principalmente en lana, elaboración de puertas y ventanas en hierro forjado, así como para artículos decorativos: lámparas, maceteros, candiles, mesas, sillas, los trabajos de cestería, tales como: canastos de raíz o de carrizo, petates, aventadores para el anafre y protectores para la cocina.
Lugares de interés
– Presa de Valle de Bravo
– La Cascada Velo de Novia
– El Mirador de Cruz de Misión
– El centro histórico de Valle de Bravo
– Mercado de artesanías
Historia
Reseña Histórica
Antecedentes Prehispánicos
A la muerte de Moctezuma en 1469, los electores nombraron a Axayácatl, en cuya época se introdujo la costumbre de no consagrar al rey hasta que hubiese salido a campaña para traer prisioneros que fueran sacrificados a los dioses.
En 1472, sucedió el primer encuentro con los matlazincas, pobladores del Valle de Toluca y en Jalatlaco. El segundo y decisivo tuvo lugar, según Payón en 1478.
Las discordias entre los matlatzincas, divididos en dos grupos, uno pro aztecas y el otro adverso a ellos, hizo fácil la conquista ejecutada por Axayácatl, quien deseoso de hacerse de sus graneros y grandes producciones de maíz, en compañía de los reyes aliados de Texcoco y Tlacopan, con ayuda de los demás pueblos del valle de México, les hizo la guerra victoriosamente, ocupando las fuerzas conquistadoras los pueblos de: Teotenango, Calimaya, Tepemachalco, Metepec, Zinacantepec, Tlacotepec, Tolocan, Tecaxic, Tecualoyan, Xoquitzingo y Tenantzinco.
Siguiendo en la táctica de conquista, con el propósito de finalizar lo conseguido, Axayácatl remitió varias familias de mexicanos a poblar el valle de Tolocan fundándose así una multitud de pueblos a los cuales los emigrantes dieron los nombres de los lugares de los que procedían. Temascaltepec, figuró entre los pueblos que conquistó Axáyacatl, en sus campañas de 1474, 1476 y 1479.
El proceso de conquista azteca se consolidó, en parte por fuertes destacamentos en el centro y periferia de la zona avasallada o por el empleo de “quislings” criollos, que hacían más fácil y económico el sometimiento. Es probable que en el caso de Valle de Bravo se recurriera al último expediente, ello se explica por qué el conquistador tuvo tiempo hasta para levantar palacios y templos cuyas ruinas -o parte de ellas- se encontraron, hacia 1930, junto a “La Peña” que, por los tiempos que nos ocupan, se sitúan casi al centro mismo del amplio y casi horizontal llano.
Antecedentes Coloniales
Cuando los soldados españoles dominaron Tenochtitlán, decidieron dominar a otros territorios, entre ellos el Matlatzinco el cual comprendía el Valle de Toluca, Teotenango, Malinalco y Ocuilan, que pagaba tributo desde fines del siglo XV. La región en que se encontraba Valle de Bravo formaba parte del Matlatzinco pero había podido mantenerse como territorio autónomo menor, hasta la entrada de los españoles.
Los grandes historiadores mencionan dos campañas en la conquista del territorio matlatzinca; la primera fue por Andrés de Tapia y la segunda fue encabezada por Gonzalo de Sandoval.
La conquista trajo consigo la evangelización del territorio conquistado, la cual inició principalmente con la llegada de algunos franciscanos en los años de 1523 y 1524 a lo que se sumaron los dominicos y agustinos un poco más tarde.
Es probable que los franciscanos hayan sido los primeros que trataron de convertir a los matlatzincas de Temascaltepec, ya que estos religiosos habían fundado varios conventos en regiones cercanas, en el siglo XVI, uno de estos conventos fue el de Toluca, fundado entre 1529-1530.
Aunque no nos consta totalmente, que Temascaltepec haya sido fundado en esta época, tres religiosos, encabezados por fray Gregorio Jiménez de la Cuenca, prior del convento franciscano de Toluca, quién decidió fundar su congregación junto al lugar denominado “El Pino”, -por alzarse allí un hermoso ejemplar de ahuehuete, (al que todos le dicen “pino”) que aún existe-, en que hoy es el corazón de el barrio de Santa María Ahuatlán.
Confirmando lo anterior, en la Estadística del departamento de México, se dice que ésta localidad fue fundada por una misión de padres franciscanos del convento de Toluca, recién conquistado el país, quienes permanecieron en la población hasta que entregaron la administración a los sacerdotes seglares, por los años de 1607 a 1615, en cuya época ya existía el templo en el mismo lugar que hoy ocupa y había además un convento, que fue bautizado con el nombre del pueblo San Franciscano del Valle de Temascaltepec.
Según la relación hecha por Gaspar de Covarrubias en 1580, se puede apreciar como era el Valle de Bravo de aquel entonces: Las minas de Temascaltepec, que es la cabecera de la alcaldía mayor y asiento de la población de los vecinos españoles, tiene tres pueblos de indios en su jurisdicción que son, el uno, Texcaltitlán, cabecera de todos, Tejupilco y Tuzantla.
Tiene su asiento y población en un valle de mucha llanura, fundado en unos malpaisares que se llaman Izquitepeque, que se interpreta maíz tostado. Pasan dos ríos, todo el año con agua, debajo de él se juntan otros, llevan algunos pescados y se riegan algunas tierras con ellos.
Siglo XIX
Después de estallar la Guerra de Independencia en 1810, los indios de San Francisco del Valle de Temascaltpec se sumaron al movimiento, gesta que don Lucas Alamán narra al detallar las crueldades que cometió en el Valle, Juan Bautista de la Torre al tratar de reprimir el movimiento insurgente.
Se asegura que la situación de la Villa era muy buena y había progresado mucho, pese a las revoluciones que continuaron arruinando al Estado de México durante muchos años. Entre los revoltosos hubo uno muy célebre que hizo su aparición hacia 1834. Se trataba de Carlos Guadalupe Tepixtoco Abad, quien proclamó un plan para restablecer el imperio de Moctezuma, que el pueblo consideró ridículo y la empresa temeraria.
Rivera Garibay realizó un viaje a mediados del siglo pasado a la zona, de la cual describe “cascadas, manantiales de aguas termales, en las que se han formado baños para enfermos, una en el punto de Tilvito y otra en el río San Gaspar; también hay fuentes de agua salobres, de los que los indígenas elaboran sal por medio de filtraciones y conocimientos…”
Señala también que “la Villa del Valle reporta algunos beneficios de la minería; cerca de ellas están las minas de San José y del Niño Perdido; ésta mina fue célebre por haber sacado de ellas los indígenas el suficiente metal para formar los vasos sagrados de una de las capillas…”
Por el valor que los habitantes demostraron en la lucha contra la invasión francesa, durante la llamada “Guerra de los Pasteles”, la población recibió el título oficial de Villa, cambiando su anterior nombre por el de “Villa del Valle”; esto sucedió el 7 de mayo de 1842 y por decreto número 60 de la Honorable Legislatura del Estado de México.
En 1847, un pequeño grupo de habitantes de la Villa del Valle entre los que figuraron José Rebollar, Ramón Uriarte y Francisco Ortíz Luque, se aliaron al ejército del general Nicolás Bravo para participar en la heroica defensa del Castillo de Chapultepec con motivo de la invasión norteamericana.
Con el lema “religión” y “fueros”, el general conservador José María Cobos tomó la que fuera entonces Villa del Valle y saqueó el vecino poblado de Amanalco en 1857.
Se sabe que la Villa del Valle era famosa en la comarca por los arreos para bestias de carga que aquí se elaboraban; también eran bien conocidos sus finos rebozos cuya industria trascendió en la época de Maximiliano que según Castillo y Piña “fue tan grande la cantidad de dinero que entró a la Villa con motivo de la venta de los rebozos, que se podían haber empedrado las calles… con plata”.
El profesor y licenciado Gustavo G. Velázquez, en su obra “Valle de Bravo en la poesía de Pagaza”, describe como era la vida en el Valle de San Francisco de Temascaltepec, en las dos primeras décadas del siglo XIX. En San Francisco del Valle de Temascaltepec, hasta las dos primeras décadas del siglo XIX cuando menos, las relaciones sociales predominantes fueron patriarcales.
Años más tarde, durante las guerras de reforma, el general lerdista Felipe Berriozábal atacó Valle de Bravo que se encontraba en poder de los conservadores. Los liberales se apostaron en el cerro cercano del Calvario desde donde le disparaban al poblado. Un metrallazo hizo blanco en la campana mayor de la parroquia rajándola por la mitad. En el libro Geografía y Estadística del Estado de México, publicado en 1889, en el pleno porfirismo, el Valle aparece como un distrito formado por cinco municipalidades y tres municipios que comprenden una ciudad, tres villas, 33 pueblos, cuatro barrios, 23 haciendas, un rancho y 24 rancherías.
Antes de que finalizara el siglo ya se contaba en Valle de Bravo con una planta para generar energía eléctrica, con una oficina de telégrafos y un teatro, el cual fue construido por Celso Montes de Oca.
Por el año de 1879, existía en Valle de Bravo nueve minas, las cuales al parecer no eran explotadas debido a la situación económica; sólo una de ellas destacó, la de El Salto, en la que se obtenía y fundía hierro para la elaboración de hornillas, parrillas y otros objetos; su propietario el francés Marcel Leglise, obtuvo varios premios tanto a nivel nacional como en el extranjero. Fue destruida años más tarde por los zapatistas.
Siglo XX
A raíz de su independencia, México vivió por más de una centuria una gran confusión política y social. Liberales y conservadores se arrebataban el poder sumiendo al país en el caos y el atraso, sobre todo en las pequeñas poblaciones. Valle de Bravo no fue la excepción, si bien la gente de orden se inclinaba tradicionalmente hacia el bando conservador, algunos ilustres lugareños, más abiertos al cambio, defendían el partido liberal y luchaban por sus postulados.
Al estallar la Revolución Mexicana en el año de 1910, el Estado de México se encontraba formando parte de las veintisiete entidades que integraban a la República Mexicana. El régimen de gobierno federal reimplantado en el país desde la promulgación de la Constitución de 1857, continuaba siendo el sistema con base en el cual se regía la entidad bajo el mandato del general Fernando González.
Para su régimen interior de gobierno la superficie territorial de la entidad se dividía en dieciséis distritos políticos y ciento dieciséis municipios, dentro de los cuales se localizaban nueve ciudades, 33 villas, 595 pueblos, 420 barrios, 393 haciendas, 480 ranchos y 348 rancherías.
Los 16 distritos políticos existentes en la entidad en 1910 eran los de Toluca, Cuautitlán, Chalco, El Oro de Hidalgo, Ixtlahuaca, Jilotepec, Lerma, Otumba, Sultepec, Temascaltepec, Tenancingo, Tenango del Valle, Texcoco, Tlalnepantla, Valle de Bravo y Zumpango.
Cada uno de ellos estaba integrado por un cierto número de municipios y conducido por el jefe político nombrado directamente por el gobernador del Estado. Valle de Bravo era la municipalidad más importante del distrito en esta época y debido a la estratégica situación que tenía se convirtió en presa de las huestes revolucionarias.
En 1937 un pequeño grupo de ingenieros de la naciente Comisión Federal de Electricidad había llegado a iniciar los estudios para la posible construcción de la planta eléctrica de Ixtapantongo y que más tarde se llamaría Sistema Hidroeléctrico “Miguel Alemán”. Los trabajos se iniciaron el cinco de mayo de 1938 y fueron concluidos el 17 de julio de 1947; se inundaron 2,900 hectáreas de las mejores tierras que tenía Valle de Bravo, a las que se denominaba El Plan; el sistema se iniciaba en la Presa Villa Victoria y terminaba en el estado de Michoacán; incluía 18 unidades de operación, que en conjunto generaban 458,775 kilowatts hora; actualmente esta presa forma parte del Sistema Cutzamala, que abastece de agua potable a la zona metropolitana de la Ciudad de México.
En 1996 por primera vez en la historia política de Valle de Bravo y después de muchos años de que el poder sólo quedaba en manos del PRI (Partido Revolucionario Institucional), triunfa en las elecciones para ayuntamientos el PAN (Partido de Acción Nacional).
El 25 de octubre de 1997 la Legislatura del Estado revoca el mandato al ingeniero Ramón Santín Orive, quien asumiera el cargo de presidente municipal el día primero de enero de 1997 y faculta a su suplente Luis Alberto Quiñones Gómez para que asuma el cargo a partir de esa misma fecha; sin embargo un hecho histórico no solo en la vida política del municipio sino del país entero, es que el 22 de febrero de 1999 el Tribunal pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación dicta un fallo a favor de la reinstalación del Ingeniero Santín, cumpliéndose este acto legal el domingo 28 de febrero de este mismo año.
Personajes Ilustres
Joaquín Arcadio Pagaza (Clearco Meonio)
Poeta castizo del humanismo que tradujo de manera integra la obra de Horacio y parte de la de Virgilio. (1839-1918)
José Castillo y Piña.
Docente del seminario conciliar de México durante 18 años, escritor de varios libros entre los que destacan El Valle de Bravo histórico y legendario, Los Oasis del camino, Mis recuerdos, entre otros. (1888-1964)
Francisco Chaparro.
Gran impulsor de la educación y fundador del colegio de La Purísima, coordinó los trabajos para construir el nuevo templo del Santuario de Santa María. (¿?-1907)
Juan Herrera y Piña.
Autor de las constituciones de la pontifica Universidad de México, fundador de una preparatoria anexa al seminario y de un colegio en Valle de Bravo. (1865-1927)
José Rebollar.
Se alistó en el ejército que defendió la integridad de nuestro país, militando bajo las ordenes del general Nicolás Bravo en la defensa del Castillo de Chapultepec. (1829-1900)
Pedro Velázquez Hernández.
Director del Secretario Social Mexicano, iniciador del movimiento nacional de cajas populares, fundador de la confederación mexicana de éstas. (1912-1968)
José Atanasio Pagaza.
Creador de un texto que sirvió a varias escuelas de la región, autor de un poema que contiene las explicaciones del sistema métrico decimal.
Manuel Primo Archundia.
Gran promotor de la enseñanza de los niños, así como de oficios como elaboración de artesanías, labrado de cantera, cría del gusano de seda, de abejas, de conejos; también enseñaba música y teatro.
Juan Manuel Patiño.
Eminente sociólogo que después de favorecer al país, emigró a El Salvador en donde fundó varias escuelas, lo cual le hizo merecedor del nombramiento de Hijo Predilecto de ese país.
Gustavo Gabino Velázquez Hernández.
Miembro de la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística, del Ateneo de Ciencias y Artes de México, individuo de número de la Academia Nacional de Historia, catedrático de escuelas preparatorias y de las facultades de Turismo, Filosofía y Letras y Medicina de la UAEM. (1910-1995)
Macedonio Pliego.
Jefe político que ordenó la realización de los trabajos para la introducción del agua potable, conducida por tubos de barro que se elaboraron en el barrio de Otumba.
Nicomedes Mancilla.
Promotor de la remodelación de la plaza para quitar la estatua de Cuauhtémoc y edificar en su lugar una fuente de cantera.
Atilano Aranda.
Regaló el terreno en el que se construyó el Hospital de San Vicente, introdujo la energía eléctrica, fundó la planta El Molino y la hidroeléctrica de González.
María del Carmen Colín Pouchet.
Gran promotora e impulsora del desarrollo social, iniciadora de la práctica de frontenis, difusora de los productos elaborados por mujeres mazahuas y otomíes en países como Franckfort, Alemania, Italia, París y Canadá, recibió en 1997 la presea al mérito municipal Alfredo del Mazo Vélez. (1911-¿?)
Ana María Caballero Jaimes.
Se destacó por su afición a la escritura, ganadora de un concurso de composición literaria con el cual se le abrieron las puertas en el departamento de educación especial de la Secretaría de Educación, Cultura y Bienestar Social del Gobierno del Estado de México, productora y creadora de programas en Radio Mexiquense. (1956-1994)
Porfirio Wenceslao Ponce Gómez.
Compositor y músico, autor de la letra y música de varios temas a Valle de Bravo entre los que destacan Rincón Soñado y Mi Valle Bonito.
Otros personajes benefactores y distinguidos de la localidad son: Francisco Osorio y Cardoso, notable protector de la niñez; Manuel Díaz Estrada y Gumercindo Garibay, filántropos destacados; Leopoldo Rebollar llegó a ocupar dos ministerios en la época revolucionaria; Hilario Osorio Arias, maestro distinguido; Margarita Chaparro Vela de Cecilia quien en 1886 obsequiara el solar donde se trazó el Panteón Municipal de Guadalupe; Rosa Vértiz de Maduro, exquisita poeta; Rafael Izquierdo, quien en 1900 construyó los primeros drenajes; Jesús M. Maduro, impulsor de las letras y mecenas; Luis Gómez Ramírez, gran impulsor de la educación, fue vice-rector del Seminario Conciliador de México durante 22 años; J. Carmen Esquivel, general Zapatista que encabezó el movimiento revolucionario en Valle de Bravo y la zona de Toluca; Carlos Gómez Almazán, político vallesano que participó en el Congreso Nacional para la formación del PNR, presidente municipal, tesorero, secretario de ayuntamiento y presidente del Club de Leones.
Cronología de Presidentes Municipales
Presidente Municipal | Periodo | Partido |
---|---|---|
C. Enrique Rebollar | de 1936 a 1937 | |
C. J. Cesáreo López | 1938 | |
C. Angel Reyes | 1939 | |
C. Simón Estrada | 1939 | |
C. Aurelio Gómez | 1940 | |
C. Francisco Ortíz Luque | de 1941 a 1942 | |
C. Justino Mercado | de 1942 a 1943 | |
C. Emilio Reyes | 1943 | |
C. Basilio Reyes | de 1944 a 1945 | |
C. Emiliano Sánchez | de 1946 a 1948 | |
C. Emiliano Sánchez | de 1952 a 1953 | |
C. Emilio Reyes | de 1952 a 1954 | |
C. Carlos Gómez Almazán | de 1955 a 1957 | |
C. Salomón Santos Coy | 1956 | |
C. Salomón Santos Coy | 1958 | |
C. Salomón Santos Coy | 1960 | |
C. J. Jesús Jiménez | 1960 | |
C. Salvador Menchaca | 1961 | |
C. Emilio Ballesteros | de 1961 a 1963 | |
C. Humberto Pérez | de 1964 a 1966 | |
C. Florencio Caballero | 1966 | |
C. María Del Carmen Colín Pouchet | de 1967 a 1969 | |
C. Juan Montes De Oca | de 1970 a 1972 | |
C. José Bravo Ortíz | de 1973 a 1974 | |
C. Adrián López Vargas | 1974 | |
C. Federico Osorio Hernández | de 1974 a 1975 | |
C. Jaime Ballesteros Vendrell | de 1976 a 1978 | |
C. Federico Osorio Hernández | de 1979 a 1981 | |
C. Carlos López Núñez | 1981 | |
C. Oséas Luvianos Estrada | de 1982 a 1984 | |
C. Josefina Esquivel Quintana | 1984 | |
C. Francisco Nuñez Reyes | de 1985 a 1987 | |
C. Andrés Jurado Mejía | de 1988 a 1990 | |
C. Francisco Rodríguez García | de 1991 a 1993 | |
Lic. Miguel Arnulfo Mendieta Sanchez | del 01-Ene-1994 al 31-Dic-1996 | PRI |
C. Luis Alberto Quiñonez Gomez | del 01-Ene-1997 al 17-Ago-2000 | PAN |
C. Alejandro Erasmo Fierro Sanchez | del 18-Ago-2000 al 17-Ago-2003 | PRI |
C. Jose Francisco Pedraza Barrueta | del 18-Ago-2003 al 17-Ago-2006 | PAN |
C. Jose Martinez Doroteo | del 18-Ago-2006 al 17-Ago-2009 | APM |
C.P. Gabriel Olvera Hernandez | del 18-Ago-2009 al 31-Dic-2012 | C.C. |
C. Francisco Reynoso Israde | del 01-Ene-2013 al 31-Dic-2015 | PAN |
Lic. Mauricio Osorio Dominguez | del 01-Ene-2016 al 31-Dic-2018 | COAL. |
C. Mauricio Osorio Dominguez | del 01-Ene-2019 al 31-Dic-2021 | PRI |
C. Michelle Nuñez Ponce | del 01-Ene-2022 al 31-Dic-2024 | COAL. |
Créditos
- Acuña, René, “Relaciones de Temascaltepeque” en: Relaciones Geográficas del Siglo XVI; México IIA/UNAM. Etnohistoria, serie Antropológica 65-7 tomo II, México 1986.
- Archivo General del Estado de México, Departamento de Fomento, Ramo Minería, expediente I y años 1932 y 1934.
- Basante Gutiérrez Oscar, Informe Proyecto Arqueológico de superficie para el sureste del Estado de México, Archivo Técnico de la Dirección de Arqueología del INAH, México, 1997.
- Castillo y Piña José, El Valle de Bravo, Histórico y Legendario, Corporación Litomex, Toluca, México, 1987.
- Colín Mario, Indice de Documentos Relativos a los Pueblos del Estado de México, ramo tierras del Archivo General de la Nación, México, Biblioteca Enciclopédica del Estado de México, 1966.
- Garibay Quintana, Angel María y otros, Diccionario Porrúa de Historia, Biografías y Geografía de México, 3ª edición corregida y aumentada.
- Gobierno del Estado de México, Panorámica Socioeconómica, 1993, Secretaría de Finanzas y Planeación, Toluca, México, 1993.
- Gobierno del Estado de México, Valle de Bravo, Herencia y Promesa, Et. Al, 1992.
- Gobierno del Estado de México, Monografía Municipal de Valle de Bravo, 1972.
- Gobierno del Estado de México, Valle de Bravo: Mí municipio (tríptico), Consejo Editorial Valle de Bravo, Estado de México, 1988.
- Hernández Rivero José y Escobedo Ramírez David, Informe preliminar de los trabajos de salvamentos arqueológicos “segunda fase”, efectuados en la Peña, Valle de Bravo, México, Manuscritos en Archivo Técnico de la Dirección de Arqueología del INAH, 1997.
- Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática, Resultados definitivos, tomo III, Tabulados Básicos, 1995.
- Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática, Anuario Estadístico del estado de México, Aguascalientes, 1995.
- IIIGECEM, Estadística Básica Municipal de Valle de Bravo,1985.
- Plan de Desarrollo Municipal de Valle de Bravo, 1997-2000, 1997.
- Romero Quiroz Javier, Relaciones de las minas de Temascaltepec y de los pueblos de Texcaltitlán, cabecera de todos, Temascaltepec y Tejupilco, UAEM, Toluca, México.
- SAHR, Comisión de Aguas del Valle de México, Información Turística e Hidráulica de interés para los habitantes y visitantes de la región , México 1985, (Folleto ilustrado
- Velázquez Gustavo G, Valle de Bravo en la poesía de Joaquín Arcadio Pagaza, 3ra. edición, Instituto Mexiquense de Cultura, Toluca, estado de México, 1993.
- H. Ayuntamiento de Valle de Bravo.
Psicólogo Héctor González Carranza.
Lourdes Mendoza Rodríguez.
Héctor Osvaldo González Mendoza.
Maestro Pedro Gutiérrez Arzaluz.
Humberto Guadarrama.
Ramón Núñez Calderón.