Cómo curar un molcajete
El molcajete es un utensilio de cocina mexicano que tiene su origen en las culturas prehispánicas, y se utiliza para moler diversos ingredientes, principalmente salsas como el guacamole y otras infinidades de preparaciones.
Curar el molcajete es un procedimiento necesario antes de usarlo por primera vez y es importante que antes se tome ciertas medidas. Debido a que los molcajetes tradicionales están elaborados con una piedra volcánica y porosa, conocida como basalto, y no debe usarse sin haberlo limpiado muy bien, pues suele soltar restos del material con el que está hecho, y al moler con el tejolote (la piedra del molcajete) se puede desprender ese material y contaminar los alimentos.
La tradición de cómo curarlo antes de utilizarlo por primera vez, se ha compartido de generación en generación y, en realidad, se trata de un procedimiento bastante sencillo.
Pasos para curar un molcajete antes de usarlo
1. Lava el molcajete con agua para eliminar cualquier rastro de tierra o piedra suelta que pueda tener.
2. Vierte dentro del cuenco unas tres cucharadas de arroz crudo y una cucharada de sal de grano.
3. Comienza a moler el arroz suavemente con el tejolote de tu molcajete. La idea es hacer que el contenido abarque todas las áreas del molcajete y que poco a poco vayas intensificando la fuerza del molido, para que las aristas más bravas de la piedra se comiencen a suavizar.
No se trata de hacer harina de arroz, procura hacer movimientos suaves.
4. Después de unos minutos verás que el arroz y la sal se irán tornando grisáceas, esto ocurre por el polvo de la piedra que se va desprendiendo. Mantén el movimiento por lo menos unos 5 minutos.
5. Realiza movimientos circulares hacia arriba y abajo, en espiral ascendente y ascendente o de orilla a orilla, además de ayudarte a que el arroz y la sal cubran todas las partes, al curar el molcajete también se practicará para preparar las salsas.
6. Después de moler y batir todo dentro del molcajete durante unos 10 minutos, tira todo el contenido a la basura.
7. Finalmente lava muy bien con agua y jabón. Una vez que se seque el molcajete estará listo para hacer una salsa, moler maíz, chocolate o piloncillo (panela), hacer moles o servir.
• Es importante dejar que la piedra se seque completamente antes de guardar el molcajete, el sol siempre será el mejor aliado.