Sobre el 8 de marzo
En esta fecha se conmemora, no se felicita ni se celebra.
La razón: no podemos celebrar las desigualdades existentes aún hoy en día entre mujeres y hombres; tampoco las injusticias, la inseguridad, la violencia y el miedo que viven.
Lo que sí podemos hacer, hoy y el resto de los 364 días del año, es tomar conciencia y sumarnos a la lucha que busca hacer valer los derechos de las mujeres, una lucha que no exige más que el trato digno que merece la mujer como cualquier ser humano.
En este día, también recordamos al hecho histórico que colocó en la agenda internacional los derechos de las mujeres trabajadoras: rememoramos a las mujeres que perdieron la vida en un incendio en una fábrica de Nueva York en la que trabajaban.
Más que felicitar, autoevaluemos nuestras acciones, evaluemos la condición, la posición y el trato que se le da a las mujeres, tomemos conciencia de la situación, rompamos patrones de comportamiento que minimizan a la mujer, sumémonos a la lucha y actuemos.